Capitulo 1: La última Batalla.

Muchas personas se preguntaran porque suelo tener ciertas especificas actitudes...
¿Por qué siempre elijo estar solo? ¿Por qué prefiero recostarme en la rama de un árbol en lugar de pasar tiempo con mis amigos?, ¿Por qué todo lo que digo solo es políticamente correcto?
... ¿Por qué no puedo tomarme enserio una relación?, ¿Por qué siempre actúo como un héroe?,
¿Por qué me emociona el peligro? 

Hay demasiadas incógnitas que a lo largo de mi vida he elegido evitar responder.
Todos tenemos secretos, y no confío en alguien sin un lado oscuro... 

Este, es el mío.











Villa Escondida, año 3235 


Sally estaba preparándose para lo que se venía, se veía fuerte, aunque yo sabía que por dentro... estaba muerta de miedo, al igual que yo.

Conocí a Sally hace muchos años, por parte de mi difunto tío Charles, o como yo le digo, mi querido tío Chuck, este era muy amigo del Rey Maximillian y la Reina Alicia Acorn. Hasta lo nombraron Sir del Reino, lo llamaban "Sir Charles" yo no me llevaba lo que se dice muy bien con Sally, ya que ella y yo tenemos personalidades realmente opuestas. 

Desde la muerte de su madre, ella no fue la misma... fue asesinada a la vez que su padre fue traicionado y apresado por el Dr. Julian Robotnik. 
Ya pasó un largo tiempo de eso... El típico cuento de terror donde tu mejor amigo te traiciona y resulta ser un científico loco.
Una gran mente... en una persona tan desquiciada. 
La "Gran Guerra" dio inicio a partir de estos acontecimientos. 

El Dr. Julian Robotnik tomó la gran ciudad de Mobotropolis.
Lo hizo... en un día. 

Yo era tan pequeño para poder hacer algo al respecto, todo ocurrió bastante rápido.
Robotnik comenzó a robotizar a las personas, incluyendo a mi tío Chuck.
Sally y yo fuimos al refugio junto con Elias, su hermano y muchos de los que ahora forman parte de la resistencia. La desesperación y el miedo de no saber que ocurría afuera consumió mi corazón a esa corta edad.
Cuando por fin pudimos salir del refugio, mis ojos vieron morir a mi querida ciudad.
"Robotropolis" alcancé a leer en uno de los espectaculares mas grandes de aquella irreconocible ciudad; humo, robots, contaminación, violencia... 

Sally y yo estábamos muy asustados, no sabíamos que hacer o a dónde ir.
Los centinelas nos encontraron y solo pudimos escapar gracias a Elias.
Corrimos al bosque mas lejano mientras el los distraía.
Nos dijo que nos alcanzaría... 
Y jamás lo volví a ver.

Sally y yo corrimos hacía lo que ahora es Villa Escondida.

Conocimos a Bunnie, una pequeña coneja que lastimosamente la mitad de ella era metal puro... Logró escapar a tiempo de la robotización. Rotor, un superdotado que también logró escapar de la robotizacion, pero sin sus padres... Antoine, llegó a la Villa gracias a su instinto escapador...
Y por último... Conocimos a Tails.
Tails, un pequeño niño huérfano, el cual gracias a su intelecto logró escapar entero de ser robotizado, y logró llegar a Villa Escondida.

Todos los luchadores de la libertad tenemos una historia...
Y cada una es distinta y desgarradora...
Pero todas, tienen algo en común.
Robotnik.

Juntos, y con el paso de los años luchamos hombro a hombro contra este imperio de metal que Robotnik habia construido.
La Gran Guerra ha durado décadas.
Y con mucha valentía y coraje... puedo decir que hoy... Hoy termina.



―Sally, ¿puedo pasar?― pregunté justo afuera de su habitación.
Vi como levantó su cabeza, se limpió un poco las lagrimas y me miró.
 Sonrío, fuerte, como si nada.
―Pasa Sonic― dijo, indiferente.
―¿Lista?―

Ella dudó un momento... estaba herida, no sabía si sería la ultima vez que me viese, tantos años han pasado, y nuestra relación cada vez se hizo más intima. Mas que una mejor amiga.
Me miro melancólica, creo que no era necesario decir ni una palabra.
—Te quiero, Sonic the hedgehog— dijo con un hilo de voz 
—Te quiero, Princesa Sally—
Seguido de esto, se lanzo a mis brazos. Yo tampoco sabía si hoy sería la ultima vez...
La abracé tan fuerte que por un momento creí que la rompería, pero a ella no le importó, me miro, y me dio un dulce y sencillo beso en los labios.
—Lista.

En ese momento fui totalmente consciente de mi realidad... —A partir de este momento, cualquier decisión que tome cambiará el curso de mi vida para siempre..— 







Todo paso muy rápido.... Más rápido de lo que creí, el solo recordarlo me hace sentir lo relativo que es el tiempo.

Salimos de la habitación y fuimos directamente al cuartel.
—¿Esta todo listo hermano?— le dije a Rotor con mi mejor tono de voz, realmente les quería transmitir seguridad. Quería que todos estuviesen tranquilos.
—Sí Sonic, todo listo— Dijo sonriente. 
Tails se acercó precipitadamente con una actitud alegre... peligrosamente alegre.
—¡Sonic!— Tails me lanzó la "mochila de misión" que contenía muchos Rings, y me sonrió enormemente. 

Luego de eso Sally me jalo del brazo preocupada y me aparto un poco del circulo en el que estábamos.
—No pensarás en llevar a T...
—¿Porqué no? todos los rebeldes tenemos que estar presentes.
—¡Sonic estas loco si piensas que te dejaré llevar a Tails!—Sally realmente tenía miedo.
—Sally... por favor, no quiero discutir... tenemos que estar todos, necesito su apoyo- tuve que hacer un gran esfuerzo para mantener mi voz firme y segura. —Necesito a Tails ahí conmigo.. como en todas mis misiones—
Sally se quedo callada un momento pensando en mis palabras..
—Tu sabes que lo cuidaré con mi vida entera, al igual que a ti.—
Sally contuvo sus lagrimas con esto último que dije, y no dijo una palabra más, solo asintió con la cabeza.

Bunnie tenía listo su anti-robotizador y sus armas, Rotor las catapultas, Tails los Rings, Antoine con lanzas, y Sally, la cabeza del plan, junto su gran compañera de bolsillo, Nicole.

 Sally siempre es la de los planes; gracias a ella siempre salimos sanos y salvos de las garras de Julian...

— Parece que estoy presenciando última vez que nos veo preparándonos para una misión.— 
Todos aquí sabíamos que sería todo o nada,... 
Y aunque ninguno lo dijo.. quizá, solo quizá, sería la última batalla.







La última batalla los Luchadores de la Libertad.
Robotropolis estaba como siempre... Robots en el cielo contaminado de la ciudad, vigilando y haciendo lo suyo; claro, nada contra lo que no podríamos combatir.
Todas sus "técnicas" de vigilancia ya las conocía, todas y cada una...
Durante años estudiamos a Robotnik, conocíamos sus combates, Robots, formas de atacar, de pies a cabeza... 

Pero era el científico más grande del mundo. Nunca dude en que nos sorprendería.
Rodeamos todo el perímetro, varías veces casi sorprenden a Antoine, pero bueno... Tanto armamento es difícil de cargar... rodeamos toda su base, listos para atacar...

—Si mis coordenadas no me fallan, Sonic, hay otra base justo encima de nosotros... pero..
*Base de Dr. Julian Robotnik, localizando... Justo por encima de la atmósfera terrestre, Sally* dijo la voz robotica de Nicole.
—Así que... una base espacial— dije tratando de sonar relajado. — hay que echar un vistaso, ¡Tails!—
Tails rápido se metio en mi mochila, antes de hacer cualquier movimiento mire a Sally para ver si aprobaba lo que estaba apunto de hacer, Sally dudo un momento, pero me lanzó una mirada aprobatoria.

—¡Vamos Sonic!— dijo Tails con un entusiasmo preocupante.
Me lanzo un Ring y pudimos subir a toda velocidad hasta la cima de la base de Robotnik, hice una seña a los rebeldes para que siguieran con el plan.

Yo distraería a Robotnik en su base espacial, mientras los demás desactivan toda amenaza desde su cuartel general lleno de ciudadanos Robotizados... ya habíamos intentado algo así durante años, pero esa noche finalmente... lo lograríamos. 

Me infiltre por donde siempre, y esquive unos cuantos Robots,... hasta que vi algo, mis ojos no me engañaban, había una puerta de seguridad máxima abierta... algo sospechoso, o quizás un descuido,  pero finalmente... entré.

Todo estaba muy oscuro, di unos cuantos pasos hasta que una luz se encendió repentinamente, una pantalla se activo, ni si quiera una contraseña pedía... eche un vistazo.
Era su gran computadora donde tenía todos sus modelos de robots, y sus planes.

Julian no solo planeaba robotizar toda Mobotropolis, si no varías dimensiones... —¿Varías dimensiones?, ¿Eso es posible?—; Había varios mundos en esa lista.

Mobius: Planeta antropomorfo...
Planeta Tierra...
Dimensión No Zone...
(...)


—¿Qué es todo esto?, ¿de verdad esos mundos existen?— 
Y no solo eso... mis ojos fueron testigos de las imágenes mas atroces. Había cosas demasiado... sangrientas... para ser Robotnik, los ciudadanos Robotizados iban a tener un nuevo chip para matar y solamente matar, torturar sin piedad... "

Empecé a temblar.. algo se había despertado en mí.. quizás un miedo que jamás había sentido.

Estaba muy concentrado hasta que algo, o mas bien, alguien tocó mi hombro...
En ese momento pude sentir como mi alma salió de mi cuerpo... Esos ojos color sangre hicieron helar mi piel de pies a cabeza, realmente no podía moverme, me quede ileso.
La espeluznante figura que se encontraba justo frente a mis ojos dio un paso hacia atrás, dejándose ver...

—Saber que vamos a morir lo cambia todo. Sientes las cosas de un modo diferente y las hueles muy distintas.— esa voz... —Sin embargo, siguen sin apreciar el valor de sus vidas, siguen bebiendo un vaso de agua... Pero no lo saborean...—

Al robotizarse, la voz se transforma en una frío sonido sin entonación, te hace sonar como una maquina sin vida y sin alma... Pero, la voz de este ser... es la mas espeluznante que he escuchado... 
Su voz era fluida... y tenebrosa.

Mis ojos comenzaron a acostumbrarse a la oscuridad y logré ver detalladamente lo que se encontraba justo enfrente de mi... casi podía sentir mi propia respiración rebotando en el poco espacio que había entre esa cosa y yo...

Sus ojos rodeaban negro y terminaban en rojo, a lo largo de su cuerpo había afiladas cuchillas, sus brazos eran especialmente filosos... Tenía colmillos, y sus garras metálicas se veía extremadamente peligrosas, podrían atravesarme con solo intentarlo.
Mi cerebro unió el rompecabezas en menos de un segundo,
esa voz... esa mirada.


—¿E..Elias?..—
Un muy mal presentimiento se cruzó por mi mente...
—Bienvenido a mi morada... Sonic— sonaba idéntico a Elias
No pude articular ninguna palabra, tenía miedo... estaba sorprendido.
—Ten miedo. Ten mucho miedo— comenzó a dar vueltas por toda la habitación, me ponía muy nervioso. —Veo que algunas cosas nunca cambian —.
Levantó una de sus manos con garras enormes, acaricio mi mejilla con ellas lentamente, yo no podía moverme... —¡Tails!... Tails estaba en mi mochila, no no, no podía dejar que nada le sucediera, por favor Tails quedate donde estas... Por favor.—

De repente sus ligeras caricias con las garras me quisieron a travesar la cara, parecía que estaba jugando... di un salto hacía atrás, toque mi rostro... sangre.

Me tomó del cuello y me levantó... tenía mucha fuerza para ser un simple robot de Robotnik...
—Para ser alguien que ha vivido una sola vez...— articulaba sus oraciones a la par de que me ahorcaba. Cada palabra que decía me hacia sentir completamente consciente de mi propia existencia.
Apenas podía respirar.


Mi estado de trance fue interrumpido por una de mis peores pesadillas.
El intercomunicador empezo a sonar...Sally.

Elias comenzó a reírse, sus frías carcajadas atravesaron mi alma. 

—¡Sonic, Sonic!, Robotnik va para su base, ¿dónde estas?, ¿cuándo nos darás la señal? ... ¡Sonic!-su voz se tornó impaciente- Sonic... ¿estas ahí? ¿estas bien? ¡Tails!



Mi corazón se detuvo.
Tails...menciono a Tails.


Elias sabía perfectamente quien era... y donde se encontraba, tendré que arriesgar mi vida... no importa que pasé, a Tails no puede pasarle nada. 

En un movimiento, Elias me arrebató el intercomunicador.
Sus movimientos eran sutiles al mismo tiempo que espeluznantes. 

—Debiste haberme matado antes de abandonarme así, hermana— un silencio aterrador hizo presencia a través del intercomunicador.  
—E..Elias...—
Una risa escalofriante invadió la habitación, a mi y a Sally...
—¿Dónde esta Sonic?! ¿Qué le has hecho?!— Sally sonaba realmente preocupada.
—Te doy los honores.— Puso el intercomunicador en mi oreja.
—S..Sally.. estamos bien
Elias sonrío preocupantemente ante el notorio plural.

Acto seguido destruyó el intercomunicador con sus metálicos dedos, haciendo un estruendoso sonido y pude sentir el pequeño brinco que dio Tails desde el interior de mi mochila.  

La puerta de la habitación se abrió repentinamente, Julian Robotnik hacia acto de presencia.

—Sonic the hedgehog... Al fin, he esperado tanto tiempo para esto... Robotnik se veía preocupantemente relajado, sereno... —ya sabes que hacer. —dijo dirigiéndose a Elias.

Elias me golpeo en el pecho muy fuerte, sus movimientos no podían ser los de un simple robot...
Mi consciencia me decía que estaba en presencia de un mismísimo demonio. 

Mi mente se apagó durante tiempo indefinido, lo sentí como si hubiera sido instantáneo pero desperté en el espacio... Lo sabía por el espeluznante fondo negro y estelas brillantes. 



Estaba en la Base Espacial. Cuando caí Tails se había salido de mi mochila.
Segundos después, me percaté de que seguía en presencia de Elias y Robotnik.
Rapidámente, me puse adelante de Tails, —no, a el no puede sucederle nada.—

—En el espacio... Nadie puede escucharte gritar.— Elias se acercó lentamente a mí.
Tails comenzo a espantarse mucho
—Tranquilo Tails, mañana... mañana estaremos riéndonos de esto- dije sonriendo limpiando los restos de sangre que salían de mi pecho. 
Tranquilice muy poco a Tails... y unas lagrimas se asomaron por sus ojos.
—Yo no creo que haya un mañana.— Dijo Elias. Acto seguido miro a Robotnik e hizo un movimiento rápido golpeándome apartándome de Tails.

Seguido de esto, le dio un puñetazo a Tails... pude sentir como la boca del estomago me ardió sacándome del trance en el que me encontraba 

-¡MATAME, MATAME A MI, PERO A ÉL NO LO TOQUES!- grité con todas las fuerzas que me quedaban, y... no sé como, pero logré lanzar a Elias del otro lado de la base espacial de un golpe. Rápido corrí hacía Tails. 

Elias de un simple movimiento logró cancelar mis movimientos entorpeciendo de nuevo mi agilidad. Era telepatía. 

Estaba en el suelo... temblando, pero extrañamente, no tenía miedo. Ya no.
Sentí furia, como jamás la había sentido. 
Pensé en la venganza, la tortura, la soledad, el odio.
La muerte.

—Al principio mencioné que a veces me daba cuenta de lo relativo que es el tiempo...
Ante mis ojos, pude ver el acto mas salvaje que alguna vez mi persona ha hecho.
Un destello de oscuridad rodeaba todo mi cuerpo, empece a perderme, empece a perder mi conciencia.
Empece a pensar que Robotnik había hecho algo en mi, pero estaba casi seguro de que esto era obra mía.  Todo mi aspecto comenzó a cambiar, y ante mi reflejo... dude realmente quien de la habitación era el verdadero demonio.— 

Realmente quería asesinar a Robotnik.

Una risa malvada se soltó de mis cuerdas vocales, salió de mi garganta como si realmente estuviera dividiéndome.
Seguido de esto me aproximé contra Elias haciendo cambiar por completo la expresión facial de Robotnik. Su sonrisa se desvaneció cuando al contrario de lo que esperaba (verme muerto), fue presente de la extracción de corazón.

Brotaba sangre real... ¿de un robot?
No me detuve a pensarlo y empuje a Elias contra la cabina, haciéndolo volar hacia el vacío... donde nadie podía escucharlo gritar.

La expresión de sorpresa estuvo en Robotnik unos momentos hasta que reaccionando rápido oprimió el famoso botón rojo. 
Lo oprimió y una superficie descendió por el suelo de la base, un destello radiante de luz.
Unas hermosas esmeraldas le daban la potencia a lo que parecía ser un hoyo negro artificial.
Un millón de preguntas pasaron por mi mente en menos de un segundo.
Era la energía suficiente para... ¿para qué?

—Sonic... te debes estar preguntando porqué todo esto. 
Verás... Me he cansado de jugar a ser Dios.
Gracias a mi ingenio y mis innumerables investigaciones, he descubierto que no estamos solos en el mundo, y de hecho existen múltiples realidades, ¿puedes si quiera imaginar lo que sería poder viajar en el tiempo?, ¿Poder controlar todas y cada una de las versiones que coexisten cada vez que decides despertar cada mañana? — Adoro ser un hombre ambicioso, Sonic.
El plan original era destruir este mundo contigo ahí... Lastimosamente me costó encontrar una realidad en la que yo esté presente sin ti, sin tu propia existencia. Tal vez algún día lo entiendas.
Lamento tener mis prioridades muy marcadas. Porque tendrás que ver como todos tus amigos junto con todo lo que conoces será destruido y eliminado de la faz de la existencia.
No puedes hacer nada Sonic, está decidido —. 


Sus palabras me dejaron helado. Jamás pensé que llegaría el día en que entendiera a la perfección todo lo que me explicó aquel día... 


Los luchadores de la Libertad subieron hasta el cuartel dentro de la atmósfera, Sally descargó todos y cada uno de los archivos de la computadora de Julian... Vieron todo lo sucedido en la base espacial desde Robotropolis.

—No te preocupes más, Sonic, no soy así de cruel... dejaré que te despidas, pero antes, quiero decirles la gran noticia.

Robotnik activo la pantalla grande del intercomunicador, en la pantalla se veían Sally, Bunnie, Rotor y Antoine.

—Ciudadanos de Robotropolis- Llamó la atención de todos en el cuartel general- He decidido rendirme. 

Todos en la base se quedaron totalmente quietos, acto seguido se miraron los unos a los otros.

—He decidido irme... pero me iré sin dejar rastro.— Las ligeras sonrisas de todos desaparecieron una a una. —Al oprimir este botón se iniciara una cuenta regresiva que hará que este planeta explote al entrar a la atmósfera de un agujero negro. Pero les aseguro, señores, que ganaron la batalla. 
No hay nada más que puedan hacer... ni si quiera el gran héroe aquí... Sonic— Robotnik sonrió. 

Yo no podía creerlo,... todo esto era como una gran pesadilla, miré a Tails, estaba con un destornillador y unas herramientas intentando hacer escapar aquella capsula en la cual Julian se encontraba parado mientras daba su aviso. 

—Sayonara, Kathole. —


hasta que lo logro.

Julian no se había percatado del peligro inminente en el que estaba.
Y un gramo de esperanza me hizo iluminarme de nuevo.
Mis aspecto volvió a la normalidad de poco en poco.

Tails sujetó un ring de mi mochila y me hizo una seña... 
A través de la pantalla le hice una seña a Sally, ella entendió perfectamente.

Reí.
—vaya Robotnik... aveces eres tan...- Tails lanzo el Ring a mis manos y los destellos comenzaron a hacer su trabajo— Predecible.
Active el poder de los rings y atravese la estructura de la maquina para destruir Mobotropolis, pero segundos antes, Robotnik había activado la secuencia de autodestrucción.

Soltó una risa malvada. Me quedé helado. 

—¿Quién es el "predecible" ahora?—
No sabía que hacer, la secuencia estaba en marcha, todos mis amigos estaban en peligro... Todo lo que conozco estaba apunto de desaparecer, justo en mis ojos.

—No.. esto no puede terminar así... debe haber alguna manera, alguna fuente de energía... ¡Un maldito milagro!—Dijo Sally observando toda la base espacial hasta que...

—¡Nicole!, ¿Qué son esas esmeraldas?— pregunto Sally
*buscando...*
—¡Corre Nicole! Que no hay tiempo...—
*Las 7 esmeraldas del Caos, tienen propiedades místicas con habilidades ilimitadas, tales como la creación de una poderosa transformación, accionar maquinas, deformar el espacio-tiempo, o controlar el Universo*
—¡Eso es! —¡Sonic!— Sally me llamó por la pantalla del intercomunicador
—Sally, lo siento tanto... 
—¡Las esmeraldas!—
—¿Qué?—
—¡Úsalas!, tienes que usar las Esmeraldas del Caos—
—¿Pero cómo?—
—Concentra toda tu energía en ellas, cree en ti Sonic, todo saldrá bien... Ya verás.. mañana nos estaremos riendo de esto.
—Gracias Sal. Mañana nos estaremos riendo de esto.

Corrí hacía las Esmeraldas, no tenía idea de que hacer, o como invocar el poder de ellas...

A diferencia de la energía negativa, la positiva hacia que el tiempo fuera mas lento, recordé todas y cada una de las aventuras que viví en Kathole, fueron únicas al igual que las personas que me acompañaron en ellas... Ellos valen el triple de lo que yo... Ellos merecen vivir plenamente.

Concéntrate... en unos cuantos segundos comencé a sentir una energía positiva en todo mi interior, toda esa energía estaba situada en mi corazón, las 7 esmeraldas me rodearon y sacaron un destello hacía mí, mi apariencia cambio, ahora un alba dorada lleno toda la habitación y, por su puesto, a mí. 

di vueltas por toda la base espacial
—¡SONIC!— Gritó Tails extasiado.

Miré a Robotnik con una sonrisa... y de un golpe lo lance lejos, hacía la punta de la base espacial.
De un momento a otro pensé para mis adentros "eso fue fácil" pero recordé que ya había activado la cuenta regresiva y que realmente no importaba ya lo que hiciera yo con él.

-¡La bomba!- Gritó Sally sacándome de mis pensamientos 

Tails corrío y comenzo a ver la computadora de intercomunicador de la base espacial y Sally desde la base Robotropolis, ambos hicieron la misma expresión... primero sorpresa, seguido de tristeza...

—Hay... una manera...— dijo Tails
—¿Y cuál es Tails?— dije, algo confundido..
—Podemos cambiar la dirección del hoyo negro, la bomba es digital, no es un cuerpo, podemos situar la bomba en otro lado— me dijo muy serio.
—¡Pues hagamoslo!— Dije, pero me sentía fuera de mi mismo. Sabía que algo malo se venía. 
—Solo hay dos opciones...
Esto comenzaba a tener sentido...
—O la bomba explota en el planeta, o en la base espacial... 

Era claro lo que tenía que suceder... pero no era necesariamente así... Si alguien iba a sacrificarse sería yo, no Tails. Observé a Tails un momento, las lagrimas brotaban de su cara y no entendí muy bien la razón, pero yo ya no sentía tristeza. 
—No te preocupes por mi Sonic, siempre seré tu amigo, y siempre estaré contigo...—


Ya sabía lo que tenía que hacer...

Tomé a Tails y lo abrace muy fuerte... Sin que se diera cuenta lo encaminé hacia la capsula donde Julian estaba parado anteriormente. 
—Siempre estaré contigo amiguito...— le susurré.
Y oprimí el botón de la capsula dirigiendo a Tails hacia la base en Robotropolis. 
A lo lejos pude ver su expresión de desesperación y tristeza...

Ahora lo que tenía que hacer era mover la bomba manualmente...
con el poder de las Esmeraldas quite la gran compuerta que daba al computador, no sabía mucho de mecanica, pero sabía como hacer esto... con todas mis fuerzas cambíe los cables de lugar y cerre con ayuda de las fuerzas de las esmeraldas la compuerta...
Me dirigí a la computadora y cambie el curso de la bomba...

02:00 minutos...

Observe la pantalla de intercomunicador... todos apenas estaban procesando lo que estaba sucediendo...
Sally... Sally lloraba desconsoladamente, al igual que los demás...
Tails estaba en total estado de shock... tenía los ojos empañados...
—¿Y yo? bueno... fue un buen final.. le deseo lo mejor a todos y cada uno.
Ojala Sally encuentre a su Padre que se que esta vivo... 
Ojalá Antoine consiga novia.. y ojalá que no sea Sally. 
Ojalá a Bunnie le quiten las partes robotizadas de sus brazos,
Ojalá Rotor cumpla su sueño de crear aviones, 
Ojalá Tails encuentre a sus padres...
y... respecto al tío Chuck.. si es que de casualidad sigue robotizado, ojalá humanicen a todos de nuevo... y que Mobotropolis vuelva a ser la ciudad que yo conocí.
Lo logré... Lo logramos.
Les deseo lo mejor.

—Princesa Sally... ¿porqué sonríe? esto no esta bien, tenemos que impedir que esto suceda..— No se preocupe Rotor... todo estará bien, ¿cierto Sonic?- lagrimas de melancolía descendían por el bello rostro de Sally.


00:05 segundos...


—Te veré del otro lado Sal...
—Te veré del otro lado Sonic...
—Sally
—¿Sí?-
—Te amo.
Una sonrisa apareció en el rostro de ambos... junto con una última lagrima. 


00:00


El cielo se lleno de luz y paz, el vació se lleno de una iluminada fantasía, el espacio tenia color y su tono era dorado. Una lluvia de estrellas se derramó ante la vieja ciudad de Robotropolis, convirtiese en un pasado. La fuente, los pájaros, las nubes. La fantasía del resurgimiento de Kathole se hacía realidad para cada ser vivo.



Sally encontró a su Padre y juntos restauraron a todos los robots, volviéndolos a su forma normal otra vez, restaurando la paz y el reino de la nueva Mobotropolis.
La resistencia siguió muchos años, pero con el tiempo, cada uno tomó su camino.



Los Luchadores de la Libertad vencieron.
Su héroe será por siempre recordado.
Los Luchadores de la Libertad, ganaron la última batalla.